Haciendo un recuento de vida me encuentro, poniendo sobre la mesa todos los pro y todos los contras de un camino hecho a base de pies de plomo, de un largo camino creado a base miedos y de inseguridades. Sobrepensando, interponiendo, y desglosando mi orgullo, mis necesidades y mi manera egoísta de mantenerme a flote en una mar cargado...
Sentado al final del día, con papel y boli en mano, surtido de sensaciones, de recuerdos, de momentos, pensamientos y emociones a flor de piel, con un nudo en el pecho que ata mi garganta y deja sin palabras a todos esos folios en blanco que he dejado atrás siendo enmudecido por la vida y el tiempo...... Así me presento...
Derrochando horas paso la noche, perdido entre el humo de cada calada, con la mirada rota en un punto de las paredes que se destruyen y caen sobre mí destrozando mi mente, dejando en pedazos a este corazón que no para de sangrar dejando huella a su paso. Imaginando caminos por donde empezar a andar, soñando...
Dicen del tiempo, que es una magnitud física donde se puede llegar a medir la duración y la separación de los acontecimientos. Eso demuestra que el tiempo no borra, no olvida, el tiempo no calma, no cura..... Quienes hacen eso somos nosotros, el olvido, el odio, la espera y la esperanza. Somos nosotros los que somos capaces de ganar tiempo...
Como quien viaja a lomo de un animal oscuro, en un vuelo hasta el fin, cargado de rabia, de ira y de fuego, así ando por los sueños y por los mundos abstractos que se esconden detrás de una mente cansada y destruida a golpes de pensamientos. Cada guerra ha dejado en cada bombardeo rencor, coraje y sentimientos encontrados...
Hoy les hablo a mis miedos, a mis muros y mis batallas. Hoy quiero ir dejando descubrir un poco más de lo que me aterra y soltar muchas cuerdas donde me encuentro atado de pies y manos, quiero romper todo aquello que me arrebata tiempos y momentos.
Echar de menos, añorar, extrañar. Tiene tantos sinónimos y cada uno de ellos duele igual, tan fuerte y repetidamente. Tantas preguntas detrás de estas palabras.... ¿por qué? ¿cuándo? ¿dónde?....
Cuenta la historia que él muere por ella y ella vive por él, que buscan el momento para regalarse noches de buenos besos, que saltan al vacío de cada una de sus miradas y que hacen el amor en el filo que los separa.
Veo la vida improvisando y te encuentro entre guerras, saciando la sed de mi desierto, dejando mudo mis labios, quitándome los miedos de probar noches enteras en tus brazos, y aunque a veces me falta el valor, sería más fácil odiarnos.
Deberíamos pensar que el momento perfecto no existe, que no hay una línea que marque el principio ni una meta que recuerde el final de cada carrera, no hay límites que indiquen hasta donde hay que llegar, eso lo marca la vida y nosotros mismos, nosotros somos los que creamos instantes y somos los responsables de todas la...